Para mí, THE MOVEMEN es un baño de realidad necesario.
Es abrir los ojos a todas esas individualidades, tantas como pacientes con cáncer de próstata hay, muchas, muchísimas, que, al ser desconocidas entre sí, no son «nada», pero que tienen mucho en común y que, al no ser un colectivo, pierden todas las oportunidades de sensibilizar, enriquecerse y ayudarse mutuamente.
THE MOVEMEN grita que ha llegado el momento de ir más allá del día a día, del hospital, de la soledad, de la tristeza, de la familia cercana, de los amigos muy cercanos, y saltar a la sociedad, al mundo exterior.
THE MOVEMEN, para mí, es un regalo después de tantos años dedicados al cáncer de próstata y una obligación moral de hacer todo lo posible por su éxito en visibilizar y mejorar la calidad de vida de los pacientes con cáncer de próstata.
Y todo ello, gracias al desenfreno, al buen estilo, al ímpetu, a la tenacidad, y al intenso espíritu vital de Javier Alcázar. Él es el mejor para poner esto en marcha y aglutinar a su alrededor gente de tanta valía personal y, por ende, profesional.
Gracias Javier, confío plenamente en tu éxito. Gritemos juntos en favor de los pacientes con cáncer de próstata.